Unas 600 personas participaron en la quinta edición de la Paella Solidaria
C. GARCÍA / Salas/El Correo de Burgos
La quinta edición de la Paella Solidaria, organizada por la Asociación de Comerciantes y Empresarios de Salas (ACOES) a favor de las personas mayores dependientes de la comarca salense, reunió en la jornada de ayer a 600 personas bajo el denominador común de la solidaridad. Ese dato supone un nuevo récord de participación, al que seguirá, cuando se realice el balance económico definitivo, otro de recaudación.
Y tanto el presidente de ACOES, Álvaro Contreras, como la vicepresidenta de la Asociación de Familiares de las Personas Mayores Dependientes, Dolores López, manifestaron su satisfacción, y orgullo, por la respuesta que ha tenido la convocatoria, que también contó con la presencia de un nutrido grupo de regidores de la zona.
Así, López resaltó que «me encuentro emocionada, porque Salas es solidaria y lo ha demostrado con creces una vez más, y sólo falta que en Valladolid tomen conciencia de que en el medio rural necesitamos más servicios para nuestros mayores dependientes»,
«Ha calado en la sociedad salense el mensaje de 'Mañana puedes ser tú', y hay que agradecer el comportamiento de los ciudadanos que están apoyando el sostenimiento de la Unidad de Respiro Familiar, y la construcción un futuro Centro de Día para el colectivo de los mayores dependientes», subrayó, por su parte, el responsable de los comerciantes, que a la vez tuvo palabras de reconocimiento para sus asociados.
Mucha actividad
La jornada, que se desarrolló bajo un excelente ambiente social y climatológico, también tuvo un tiempo para el senderismo y el reconocimiento paleontológico de las huellas de dinosaurio de Costalomo, donde el director del Museo, Fidel Torcida, ilustró a los asistentes acerca del proceso de formación de las icnitas, y de otras cuestiones.
Mientras eso tenía lugar, un centenar de voluntarios se afanaban en los preparativos de la 'gran' comida, que iba a tener lugar en el polideportivo cubierto. En esas tareas destacaban los cocineros que, coordinados por Carlos Olalla, manejaron 50 kilos de arroz, 25 de mejillones, 20 de congrio, 7 de cigalas y unos 50 de diferentes productos para el caldo, entre otros ingredientes.
La mayor parte de la factura correspondiente a esa realización gastronómica ha corrido a cargo de la empresa local Admarmor Seguros S.L. y Compra-Venta Europa, con una aportación en torno a los 900 euros.